Organizaciones apoyadas por el Fondo de Mujeres del Sur, provenientes de distintos países de América Latina, participaron de las jornadas del Foro. Algunas integrantes del equipo ejecutivo las acompañamos, y aprovechamos la instancia para reunirnos e intercambiar historias, proyectos y estrategias.
El Foro Mundial de Derechos Humanos es uno de los encuentros más importantes para activistas y líderes de todo el mundo. Es un espacio de debate y reflexión sobre los avances y desafíos en la lucha por la justicia social y la protección de los derechos humanos a nivel global.
La tercera edición de este evento fue organizada por el Centro Internacional para la Promoción de los Derechos Humanos – UNESCO (CIPDH – UNESCO) y la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación (Argentina), en el marco de la Semana de la Memoria.
El III Foro se llevó a cabo del 20 al 24 de marzo en Buenos Aires (Argentina), y contó con más de 21 mil participantes de organizaciones y movimientos de 98 países de América Latina y el mundo.
Durante los días del foro, las personas que participaron pudieron asistir a diversos paneles y exposiciones de líderes y activistas. Esto permitió compartir experiencias y luchas por la defensa de los derechos humanos, así como tejer redes entre organizaciones a nivel local, nacional e internacional.
La fecha seleccionada no es casual: el 24 de marzo fue el 47º aniversario del golpe de Estado que dio inicio a la última y más cruenta dictadura cívico-militar de la historia del país, en el marco del Plan Cóndor para América Latina. a De 1976 a 1983 se profundizaron y sistematizaron en Argentina los métodos del terrorismo de Estado, como la desaparición forzada de personas, la tortura y el robo y apropiación de niñes.
Los debates especiales y actividades autogestionadas tuvieron lugar en el Espacio Memoria y Derechos Humanos ex ESMA (Escuela Superior de Mecánica de la Armada), una de las cuatro sedes del foro que albergaron mesas temáticas, conferencias y presentaciones musicales.
Este espacio está cargado de sentido político, ya que ahí funcionó uno de los centros clandestinos de detención, tortura y exterminio más grandes del país. Como señalamiento de la necesidad del ejercicio de la memoria colectiva, de la reparación y la defensa activa de los derechos humanos, el lugar es desde 2004 el Espacio para la Memoria y para la Promoción y Defensa de los Derechos Humanos.
En este contexto, el Fondo de Mujeres del Sur (FMS) estuvo presente para acompañar a varias organizaciones copartes en sus exposiciones, entre ellas la Asociación de Mujeres Peruanas Afectadas por las Esterilizaciones Forzadas (AMPAEF), quienes en su panel compartieron la lucha de 25 años para obtener justicia y reparación por las esterilizaciones forzadas ocurridas durante el gobierno antidemocrático de Alberto Fujimori (1990 – 2000) en Perú. Esta práctica racista y violatoria de los derechos humanos afectó a más de 300.000 mujeres indígenas, quechua hablantes, campesinas y de bajos recursos económicos. La lucha de AMPAEF es por la verdad, justicia y reparación integral de sus víctimas.
Asimismo, desde el FMS acompañamos al grupo LesWarmi, mujeres originarias lesbianas y bisexuales (Tucumán, Argentina), en su presentación-taller sobre estrategias para promover los derechos de las personas mayores LGBTIQ+.
Durante el taller, se presentaron herramientas interactivas para generar espacios más seguros e inclusivos para esta población, y modos de intervenir en caso de discriminación presencial. LesWarmi, mujeres originarias lesbianas y bisexuales trabaja desde 2008 para erradicar la estigmatización de las personas mayores y la diversidad sexual a través de acciones de incidencia tanto presenciales como remotas.
AMPAEF y LesWarmi, mujeres originarias lesbianas y bisexuales son dos de las organizaciones apoyadas por el FMS en el marco del programa Liderando desde el Sur (LDS), iniciativa feminista para fortalecer el activismo de las mujeres en el Sur Global. Ambas organizaciones recibieron un apoyo especial para participar del III Foro.
El III Foro también fue una oportunidad para que las organizaciones apoyadas en el marco de LDS tuvieran un encuentro presencial para confraternizar y compartir luchas. Pudimos reunirnos con más de 15 integrantes de diez organizaciones. Intercambiamos experiencias y conversamos sobre estrategias para generar posibles acciones de incidencia en conjunto a futuro.